¿Qué es una D.A.I.C.O. y porqué es mejor que una I.C.O.?

Seguramente has oído hablar de una ICO y te habrán invitado a participar en ella. Pero, ¿sabes cuánto riesgo hay en ellas? ¿sabes en qué te estás metiendo?

Una ICO, Initial Coin Offering, es un instrumento de financiación, esta expresión significa, oferta inicial de moneda, y se utiliza para apoyar un proyecto de criptomoneda, de manera que le entregas capital a un equipo de desarrolladores con el fin de que estos impulsen el proyecto, al participar de una ICO, recibes una cantidad X de monedas. Si el proyecto falla y por tanto su moneda, tu inversión se va al piso, si el proyecto es serio, tu inversión crece con el proyecto. Es algo así como si pusieras un capital para desarrollar, por ejemplo, un restaurante, si el restaurante falla, pierdes, si funciona, ganas; si a quienes diste el capital son inescrupulosos o inexpertos, se te pueden perder con el dinero. Por eso es fundamental que conozcas a profundidad el proyecto y quienes están detrás de él. Tarea difícil.

El creador de Ethereum Vitalik Buterin ha propuesto una manera de democratizar y asegurar el capital de los inversores en una ICO, de manera que éstos puedan recuperar su inversión si los desarrolladores del proyecto fallan, la ha denominado D.A.I.C.O

Este mecanismo, se convertirá en un criterio crucial para definir si un proyecto es serio o no lo es. Utiliza el protocolo de Ethereum a manera de Contrato Inteligente y permitirá a los participantes lo siguiente:

1. En ningún momento se deposita toda la confianza en un equipo centralizado. Las decisiones sobre la movilización de los fondos invertidos, se deciden mediante un sistema democrático de votación.

2. La financiación no se libera de inmediato, sino que se aplica un mecanismo para distribuirla por períodos, en el transcurso del proyecto.

3. Por último, se puede reembolsar el dinero aportado. Es decir, los inversionistas pueden votar por el reembolso de las finanzas restantes, si el equipo de desarrollo no logra implementar el proyecto.

¿En qué difiere de una ICO?

Así lo explica Cointelegraph:

"La principal diferencia es el acceso a los fondos.

Con una ICO, una vez finalizada la venta de token, los desarrolladores tienen acceso completo a todos los fondos aportados. Los desarrolladores tienen que calcular de antemano cuánto es necesario para producir un producto mínimo viable y una vez que alcanzan esta cantidad, llamada "el límite suave", pueden empezar a trabajar en el producto y gastar el dinero en lo que consideren necesario. Si no alcanzan este límite , tienen que devolver el dinero. Pero si lo hacen, no hay obligación real.

Con una DAICO, los contribuyentes pueden votar sobre las resoluciones (durante la fase de desarrollo) para aumentar el presupuesto o devolver los fondos restantes (autodestrucción del contrato)."

La primera D.A.I.C.O. conocida es la de Abbys una empresa de desarrollo de videojuegos.

Aunque las D.A.I.C.O. presentan también una serie de desafios, como el número de votos que puedan adquirir los mismos desarrolladores y que el nivel de educación de los inversores pueda llegar a torpedear inconscientemente el proyecto, es sin lugar a dudas una propuesta revolucionaria en materia de aseguramiento de la inversión.

En conclusión,si vas a participar de una ICO tendrás más garantías si se hace a través de una D.A.I.C.O.

¿Porqué se denomina D.A.I.C.O.?

Se trata de una mixtura con la abreviatura de D.A.O., también llamada Empresa Autónoma Descentralizada (en inglés Decentralized Autonomous Corporation) o DAC, es una organización que está dirigida a través de reglas codificadas en programas de ordenador llamados contratos inteligentes, lo que termina describiendo a las D.A.I.C.O. como Oferta Inicial de Moneda Autónoma Descentralizada.