Es gracioso como trabajar en proyectos que no amas te hace sentir que tu vocación en realidad no lo es tanto.
Sin embargo hoy, tal vez por aburrimiento, tal vez por la llama interior, me senté a editar un vídeo. Amo como está quedando. Me siento todo un pro. Y lo mejor, no tengo ganas de parar.
Si pudiera enviar vídeos acá mostraría la intro que hice, que a mi parecer queda genial.
Haz lo que te gusta, en serio.