El lugar perfecto

-Despierta cariño... - Una voz dulce me susurró mientras sentía como se apartaba de la cama al abrir los ojos miré a Christa. Ella completamente desnuda, estaba apartando las cortinas de la ventana, la penumbra hacia que cada curva de su cuerpo resaltara, su cabello brillaba con la poca luz que aparecía en la madrugada, sin embargo, también pude apreciar las cicatrices que ocultaba su uniforme. Desde el cuello  hasta sus piernas sobresalían cicatrices de cortes, algunas grandes, otras pequeñas, pero eso la hacía especial. -No veas tanto mis cicatrices, no me siento cómoda con eso.

-Lo siento, pero no puedo dejar de hacerlo.

-¿Porqué? -miró hacia mí en cuanto hizo esa pregunta, el angulo que estaba de la ventana hizo que la luz reflejara en sus ojos, en ese momento se mostraban amarillos, cambiaban por emociones fuertes... Sé que también estaba desnudo, pero esa mirada me recordaba algo tan profundo, las imágenes volvían y con eso un recuerdo del porqué ella tiene cicatrices. Ella me miraba con sorpresa (es increíble como se dio cuenta que estaba recordando) -¿Estás bien?- dijo.

-Estoy bien... (Seguidamente dije lo que pude recordar) Solo quiero mirarte, el poder... (olvidé lo que seguía)- Pero ella continuó para mi sorpresa.

-El poder tenerte, es mi mayor regalo.- Nos dimos un beso largo y apasionado, donde el amanecer solo podía descubrir nuestra vergüenza de vernos desnudos en la claridad -es raro, como si fuese la primera vez después del matrimonio, mi vida me alegro que estés recordando-. Mientras nos vestíamos, preguntó -¿Cuando quieres ver a Mist?, entiendo si pides tiempo para recordar.

-Me parece bien, quiero verle cuanto antes.

-*Suspiro* ¿en serio?. Su radio suena <<Agente Chris, necesitamos que te presentes, hay un caso interesante que te fue asignado por el jefe. Cambio>> -¡diablos, justo ahora!, Voy en camino *estática* cambio. Bueno, resuelvo esto y enseguida te busco de nuevo, por cierto, nada de llamar a Max, yo quiero traer a Mist y ver su reacción -. Salió corriendo al auto y el sonido de las ruedas quemando el asfalto hizo que saliesen los vecinos para ver si se trataba de un robo de coche.

     En el trabajo, de nuevo en mí cubículo, llegó un e-mail...

¿quieres un premio?, tu buen trabajo hizo que se adelantara muchas cosas importantes



para este plan infalible, Busca otro día (quizás mañana), ese día que busques tendrá



que ser muy especial, después busca un lugar, con ese lugar en la mente y el día,



me enviarás un mensaje con eso, además, con algo o alguien con quien quieras estar en



ese lugar, ese día; todo para cumplir con <<El lugar perfecto>>.

-El Lugar perfecto- susurré. Pensé en tantos lugares del mundo, pero podría ser todo el mundo, el existencialismo de esta dinámica me hace desear utopías nunca antes mencionadas. De golpe algo no cobró sentido, la redacción de este mensaje no es muy correcta, es aceptable en términos informales, esto es un mensaje oculto. -¡No puede ser!.

     El mensaje no tendría sentido, pero son ordenes para encontrar el caso del que más se habla en el trabajo, la fuga... Cabe destacar, que el documento que le dí a Sebastian, es exactamente eso, el informe de D'CORP que había provocado la fuga, intencionalmente. Cada vez más, intentaba suponer que quería el señor <<X>>. ¿Para qué necesita mi ayuda?, puse manos a la obra y lo que encontré fue -archivos cifrados, necesito el acceso al servidor principal-. Para resumir, se trata de represalia, <<X>> sabía que yo podría ayudarle a conectarse al servidor principal, el acceso total a los archivos de todas las fechas posibles, pero no sería de la forma que lo estoy haciendo (trabajador de la ICS), necesito algo más creativo y muy imperceptible. Me levanté de la silla, tomé mi anorak y salí a la institución de D'CORP más cercana.

     La recepcionista preguntó -¿En qué puedo ayudarle?. Mirando a todas direcciones, identificando la cantidad de vigilantes a esa hora de la mañana, no podía dejar de sentir que me sentía observado, las cámaras no me enfocaban, pero esta sensación es aberrante, una especie de acoso sin saber quien... -¿Señor?.

-Ah claro, supongo que no le notificaron de mi llegada-. Mi voz calmada y serena intentando realizar el engaño.

-¿Y usted es?.

-Soy Gerard Wallace, inspector de seguridad.

-Lo siento, no hemos sido informados sobre la llegada de un inspector.

-Bueno, los errores le ocurren a cualquiera-. Antes había tomado la dirección de correo electrónico y había formado un mensaje sobre la visita de un inspector de seguridad, quién, si no le es aceptado, clausuraría la sede... Sin embargo, no había enviado el e-mail para saber que tan fuerte son sus contratados.

-Lamento informarle que si no tiene una cita previa, la entrada le será negada, por favor-. Señala la puerta en sentido de que me largara.

-Claro, no se preocupe... Este lugar será clausurado de todas maneras, llamaré a sus superiores sobre esto-. Levanto el celular y envío el mensaje mientras lo coloco en mi oreja y me acerco más hacia la  puerta. Puedo escuchar una notificación del correo en el ordenador de la recepcionista.

-¡Espere!- dice con emoción -lo siento señor, no había visto la fecha (excusas), notificaré que ya está aquí, diríjase al tercer piso en la sala de espera de <<recursos humanos>>.

-Tranquila, los errores le ocurren a cualquiera-. Decir eso parece cobrar sentido para ella.

    En el tercer piso, no me acerqué a <<recursos humanos>>, fui evitando a las personas hasta llegar al ascensor del administrativo, este lleva al sótano que solo es para <<personal autorizado>. El sótano avanzaba por un pasillo demasiado grande, muchas puertas de metal, al final del pasillo se encontraba el cuarto de servidores, pero la puerta es magnética, necesito un carnet autorizado. El panel de acceso contaba con un lector, y un teclado numérico, <<parece ser que solo necesito una de dos>> pensé, espolvoreé algo de maicena sobre el teclado y luego soplé suavemente, quedaron las marcas de las huellas dactilares, usaban 4 digitos, limitados en los números 7, 2, 8, 9. Probé con la combinación 2789 <<incorrecto>>, 9728, la puerta se abrió <<soy lo máximo>> pensé. Ya estaba dentro del cuarto de servidores, veamos qué hay aquí.