“La auténtica democracia es siempre imperfecta. Los que anhelan la democracia perfecta (e inamovible) desean en realidad ‘otra cosa’, que resulta ser no democracia. La imperfección de la democracia viene dada por principio, porque se trata de un proceso y no de un ‘estado’, o, si se quiere, de un estado en proceso, en movimiento”.
“Aflorismos”
Pensamientos póstumos
Carlos Castilla del Pino
Tusquets, 2011