Hola a todos, otra vez yo!
Esta vez vengo a postear sobre una hermosa montaña que bordea la zona Norte de mi ciudad natal, Caracas, llamada El Ávila, conocido también como el Parque Nacional Waraira Repano. Este gran monumento natural forma una barrera entre el mar Caribe y la ciudad capital. Les digo que este parque es un lugar majestuoso, conformado por hermosos parajes e impresionantes caídas de agua fría, desde dónde se puede apreciar nuestra ciudad en tamaño miniatura. Esta aventura de visitar la montaña, puedes vivirla de tres maneras, subir caminando y a la vez ejercitando tu cuerpo, en carro rustico siguiendo el camino natural y la otra es subiendo desde la ciudad por el Teleférico.
Hay una parte en el trayecto cuando vas por el teleférico en donde se ve un profundo hueco en el bosque conformado por arboles de distintas especies y que debido a la altura desde el punto en el tramo en la que estás te puede dar un poco de miedo. Una vez que se llega a la cima de la montaña, “Ávila Mágica”, se encuentra el Hotel Humboldt un famoso hotel que se inauguró en el año 1956.
Si decides subir caminando tiene que gustarte hacer ejercicios al aire libre y amar la naturaleza, te tiene que gustar la montaña y saber que puedes encontrarte con grandes rocas y piedras de diferentes tamaños, montes de diferentes colores naturales debido a nuestro clima tropical y cientos de animalitos que muy poco se ven en las ciudades. Otra sorpresa que encontrarás cuando estés en la cima de la montaña es el clima, te advierto que allá hace frío pero con un poco de Sol caribeño a la vez.
Ahora si te gustaría comer o probar alguna bebida, te recomiendo que tomes un camino que conduce a un pueblito llamado Galipán, donde encontrarás cafeterías y restaurantes donde sirven platos típicos del lugar, preparados en su mayoría con productos naturales cultivados en la misma montaña. Asimismo podrás disfrutar de una mágica vista de nuestro mar Caribe que es la entrada marítima por excelencia de nuestro país.
En un sector de este hermoso parque se encuentra el cerro Papelón del Ávila, ahí podemos apreciar una gran cruz, cerca del Hotel Humboldt. Su encendido comienza el primero de diciembre como anuncio de la temporada navideña hasta el seis de enero. De niña siempre me gustaba observarla cuando iba en el carro. Hay un sendero por donde se puede subir caminando hasta allá, espero algún día poder ir a verla.
Esta fotografía corresponde a la visita que hice al parque el Ávila el día de mi cumpleaños #16 con mi compañeros, subimos en teleférico, queríamos ir a patinar en la pista de hielo que allí se encuentra.
En estas imágenes se puede apreciar la pista y nuestra experiencia montados en esos patines.
En esta foto me encuentro en un lugar llamado La Piedra del Indio, desde donde se puede observar un poco de lo que es Caracas.
Una anécdota divertida de ese día, fue que bajando caí sobre un arbusto, al principio me asusté porque pensé que había caído a un pequeño precipicio, menos mal todo fue un susto, ahora cada vez que mis amigos y yo nos acordamos de eso nos reímos y no se crean todos en algún momento se iban cayendo también.
Aquí me encuentro en un lugar conocido como La Silla, un poco más de la mitad del camino para llegar al Humboldt, recuerdo que ese día caminé durante 6 horas para llegar hasta el hotel, agotador, pero valió la pena y lo mejor es que luego de llegar disfrutas de esa maravillosa vista que hay desde allí, es algo inigualable.
No puedo finalizar este post sin mostrarles esta hermosa foto que tomé el año pasado, donde puedes apreciar el lado Nor-este de esta majestuosa montaña que representa uno de los lugares naturales más hermosos de mi país.