¡Excelente artículo, amiga @franyeligonzalez!

Nuestra sociedad está expuesta a estrés constante, producto de unas exigencias cada vez mayores en el plano laboral, la incertidumbre económica, nuestras prisas y, en ocasiones, la falta de recreación y descanso.

Asimismo, influye en esto el hecho de que estamos cada vez más conectados a través de las redes sociales, y menos con nuestro entorno. Pocas cosas son tan importantes para un ser sociable como nosotros como las relaciones significativas con nuestros parientes y amigos.

Es necesario, de vez en cuando, desconectar. Mientras estemos preocupados el agotamiento se intensifica. El silencio, como bien dices, es magnífico para aislarnos del ruido externo e interno.

A mí también me gusta escribir, sobre todo narraciones, como medio recreativo, como posiblemente ya te habrás dado cuenta, pero además, para organizarme y orientar mi comportamiento y acciones hacía el cumplimiento de mis metas personales.

El dibujo y la lectura también me ayudan a distraerme, a veces viajar a otra realidad, y olvidar las preocupaciones del día a día. De igual forma, leer nos permite aprender sobre diversa cantidad de temas (depende de cuán variados sean los contenidos que nos interesen o a los que le demos oportunidad).

En la parte de hacer ejercicio estoy más deficiente. Hasta el año pasado estaba inscrito en un gimnasio, pero la cuarentena me hizo más perezoso. Sin embargo, debo decir que la actividad física mejora mucho nuestro ánimo y calidad de vida.

Me encantó lo que escribiste.

Saludos.