Les dejo un poema del autor William blake, un poema que define perfectamente al mejor amigo que una persona puede tener, su gato, para otros serán, efectivamente los perros, cada uno sus gustos ¿verdad?.
Él me ha sacado adelante siempre, con sus mimos, sus ronroneos, su calma, su locura, contradictorio ¿verdad? y es que todos los felinos simplemente son imprevisibles, y es en ello donde radica su genialidad.
Genialidad en el sentido que siempre te sacan una sonrisa, siempre te sorprenden con nuevas cosas, nuevas travesuras que te hacen quererles siempre aún más, y cuidarles, siempre cuidarles, darles todo lo que se merecen y no dejarles nunca de amar.
Tigre! Tigre!
Ardiente resplandor en las selvas de la noche,
¿que inmortal mano o qué ojo pudo enmarcar tu temida simetría?
¿ En qué lejanos abismos o en qué cielos ardía el fuego de tus ojos?
¿A qué alas osaba aspirar? ¿ que mano oso coger el fuego?
¿ y que hombros, y que arte pudieron retorcer los nervios de tu corazón ?
Y cuando tú corazón comenzó a latir,
¿que temible mano?
¿Y que temidos pies?
¿Cuál fue el martillo?
¿ cual la cadena?
¿En qué fragua cayó tu cerebro?
¿Cuál fue el yunque?
¿Que temible abrazo oso sujetar sus terrores mortales?
Cuando las estrellas arrojaron sus lanzas y regaron el cielo con sus lágrimas,
¿ acaso sonrió al ver su obra? ¿Acaso quien creó al cordero te creo a ti?
William Blake.
