Un compañero se va,
como otros,
en busca de un "mejor destino".
Frase recurrente.
Su vacío lo llenaremos de recuerdos,
de momentos.
Los días nos van marcando,
las grietas se ven reflejadas en nuestra piel,
en el silencio,
en el eco de brisa que nos mantiene atentos.
De él, me quedará su frase: "Locos los que estamos, locos los que llegan",
que haré mía para mantener su presencia día con día.