Estando en la sala y rodeados de amigos cercanos y familiares, la pareja de hermanos que acababa de regresar a casa, luego de una semana larga en las selvas orientales de la Amazonia, incomunicados, pues perdieron sus celulares mientras huían de una pantera que los tomó por sorpresa mientras calentaban la comida en la hoguera que hacían cada tarde. Lidiar con la incertidumbre del camino, con el hambre y la fatiga emocional, fue el gran desafío.
Luego de aquella noche a la intemperie, mientras recordaban el camino, para volver a la pequeña carpa, lograron organizar los pensamientos y lograr la estabilidad emocional. Recordaron por donde se había ocultado el sol; y cambiaron la ruta, a las pocas horas encontraron sus pertenencias sin carpa, está se había caído. Acordémonos de las palabras de Mahatma Gandhi, “Cuando hay una tormenta, los pajaritos se esconden, pero las águilas vuelan más alto”