Apreciaciones Breves 2

Da satisfacción hacer algo útil y dejar una huella en la vida, con una labor realizada con brillo y pulcritud.

Tenemos el poder de hacer uso, de echar mano, a toda esa energía que pone a nuestra disposición, esa fuente inagotable, eterna, humilde y siempre desapercibida pero innegable que es Dios, a quien debemos agradecer a diario el estar presente en este paseo, que es la vida.

Existe gran variedad de flores, cada una con belleza, color, aroma singular; todas ofrecen lo que son al universo, llenándolo con su sola presencia, y no vemos a unas destrozando a otras por ser mejores o queriendo ser una como la otra, cada una tiene su ser singular y único. No existe mejor ejemplo de vida. Si actuásemos igual que las flores, seríamos una perfecta humanidad y construiríamos un mundo ideal.

Observamos a quien ha caído pero no somos capaces de vislumbrar al que será capaz de levantarse de entre sus escombros. Tenemos memoria para recordar errores y señalamos a quienes los cometen; igualmente procedemos con los fracasados, con los perdedores....... carecemos de percepción, pues los fracasos se tornan en triunfos, los errores dejan experiencias y se corrigen dando resultados fascinantes; los perdedores aprenden el valor que concede el intentar y perseverar aumentado la posibilidad de ganar. La apreciación de estas realidades nos convierte en sensibles a lo que somos en un presente y lo que podemos llegar a ser en el futuro.

Deposita tu fe en alguien, habrá un momento de su vida que lo recordará y será reforzado con esa fe tuya de otrora, aunque no estés a su lado y ni siquiera llegues a enterarte; pero tu asunto es hacerlo, el resultado es asunto de Dios.

He visto más humanidad en la gente común que dentro de las iglesias.

La maldad hace su morada en quien menos te lo esperas, es increíble lo que puede llegar a hacer para tener éxito, y somos tan débiles, que regalamos el triunfo la mayoría de las veces.

No en vano Jesús dijo que su familia eran aquellos que hacían su voluntad. Es curioso pero quienes más fe depositan en ti, conocen tu espíritu y palpan tu alma no son precisamente familiares, solo en casos excepcionales. Tus más fieles fans, quienes logran ver dentro de ti, a través de tus ojos, son personas recién llegadas y que Dios pone en el camino, para que sepas que habita donde menos te lo esperas, así llama tu atención acerca de Su existencia y tu ser verdadero.