Solo debes calmarte, tener pasiensia, actitud positiva y sobre todo buena salud para poder concentrarte en un plan a largo, mediano o corto plazo, adaptado a tus posibilidades, donde le des importancia a los problemas que realmente tengan solución, a las decisiones que necesariamente tengas que tomar y a futuras metas de cualquier alcance , que te proporcionen, a medida que vayas progresando, un poco del bienestar tan deseado.
Sólo así en un futuro no muy lejano todos o quizás algunos de los aspectos que tu consideres más importantes cambiaran a tu favor y esa mala situación deberá quedar en tu mente como el recuerdo de la forma en que lograste superarla, ya que el aprendizaje te indicará la manera de actuar ante las situaciones complicadas y evitará que te abraces nuevamente al desespero que solo conlleva a tomar decisiones incorrectas.
Lo más mportante es mantenerse activo con la mente fija en el propósito de lograr tus objetivos y nunca detenerse, pase lo que pase, para evitar el retorno de ese sentimiento que te hizo sentir tan mal en su momento, recuerda que de ti y solo de ti depende tu bienestar.