Su nombre es Lally.
Llegó a la mi familia en el 2016. Para justificar su estadía en mi casa le dije a mi tía que sólo la iba a cuidar un par de dias mientras le encontraba un hogar,obvio ese par de días se convirtieron en semanas, meses y ahora va a cumplir 3 años en mi casa.
En un principio fue dificil tenerla, era muy pequeña y se encargó de dañar todo lo que encontró a su paso, como pasaba mucho tiempo sola pues supongo que se aburria, asi que para divertirse decidió morde zapatos, dañar alfombras, orinar muebles, dañar cables, llorar hasta que llegaramos etc. Mi tía que no es nada tolerante ya estaba llegando al borde, porque la perra además de dañar todo también se encargaba de orinar en cualquier lugar menos en el periódico. La casa era un completo caos asi que mi tía me dió un aviso " si Lally no aprende en un mes a ir al baño se tendrá que ir" por un momento me preocupó, pero después deje la educación de Lally a la suerte...
Mientras yo hacia mi papel de madre irresponsable, Lally con sus travesuras y su mal carácter (podríamos decir que su actividad favorita es morder niños y gruñirle al conserje de mi edificio) se ganó no sólo el cariño de mi tía, también se ganó a toda la Familia y mi tía quien se rehusaba a mantenerla y cuidarla es ahora quien se encarga de prácticamente todo ( bañarla, sacarla, darle de comer etc) digamos que se ha convertido en la dueña de Lally
Para suerte de todos Lally ya "sabe" hacer sus necesidades donde le toca, tiene algunos problemas como que no le gusta bañarse ni dormir en su cama, también sigue mordiendo gente en la calle pero nadie nos ha demandado :).
Con el tiempo se convirtió en un miembro muy importante de mi familia, es el equilibrio de nuestro hogar.
anexo foto de Mau, el enemigo número 2 de Lally (El número 1 es el conserje de mi edificio).