Una mujer fue al cementerio a colocar flores en la tumba de su marido pero había algo muy particular escrito en la lapida decía: " Este fue un gran hombre infiel" por supuesto esta lapida la mando colocar su mujer y ella se encargo de dejar constancia de lo que fue este hombre, un marido que le fue infiel, un marido que adultero en su contra.
Vamos a otro caso un joven que roba una cartera para comprar cigarrillos, y es descubierto y es despreciado por sus familiares y vecinos, pero resulta que este joven estudio mucho y se convirtió en un gran empresario.
La sociedad algunas veces tiende a lapidar a quienes cometen errores, pero quieren una atención diferente para cuando ellos cometen los errores, ellos se sienten merecedores de consuelo y comprensión, pero resulta que cuando es otro que comete el error resultan ser implacables, como si con esto recibieran consuelo por su propia condición imperfecta y castigaran hay sus propias faltas, y esto resulta en una sociedad que algunas veces desecha como inservibles a los que se equivocan en algún momento de su vida.
Pero DIOS nos da una segunda oportunidad, porque EL es tardo para la ira y grande en misericordia, esto porque aun cuando nunca le rindamos obediencia y reconocimiento, EL no nos niega la oportunidad de ir EL, ademas nos muestra su amor real y verdadero al no llamarnos por nuestro pecado sino llamarnos por el nombre de su HIJO, al no dejar una lapida que recuerde nuestro pecado sino que nos da una segunda oportunidad. porque nuevas son sus misericordias día a día.
Gracias JESÚS por tu amor y sacrificio y por regalarme la salvación y nueva oportunidad de vivir, amen.
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