Siento en mi espíritu
Tu peso, carne muerta.
El derrumbe es el triunfo
De este cuerpo.
Irse en vida deshaciendo
Poco a poco.
Irse pudriendo lentamente
La materia.
Pobre espíritu apresado,
Queriendo volar
Y está sujeto.
Crisálida la vida
Surge, surge,
Se transforma ¡y vence!