Lo conocí en un momento inesperado, desde ese instante me cautivo con su mirada y su hermosa sonrisa, parecía un sueño hecho realidad. Desde ese entonces, poco a poco me fui enamorando de su ternura, de sus caricias, de sus besos, de su arte de amar, de esas ganas de vivir al máximo, siempre estaba ahí para alegrarme mis días, por muy difícil que fuera mi día, lograba hacerme reír hasta no poder más.
De pronto, todo cambio, cuando me dijo:
Al siguiente mes, nos casamos desde ese entonces me convertí en mujer más feliz del mundo. Nunca discutíamos y cuando llegaba un poco estresada, me calmaba con un dulce beso, sentía que todo a mi alrededor se paralizaba, me a regocijaba entre sus brazos, sus caricias tan tiernas y llenas de amor, amaba pasar el tiempo con el, era mágico. Así pasaron 3 hermosos años, les puedo decir que fui la mujer más feliz del planeta.
Pero, algo paso, Carlos enfermo, recurrimos al doctor de confianza, una noticia devastadora, a mi gran amor, le diagnosticaron cáncer, estaba muy avanzado, que le quedaba poco tiempo de vida. Para mi fue el peor día de mi vida, no podía creerlo estaba devastada, si el lo era todo en mi vida.
A pesar de la noticia, el lo tomo con mucha calma, y me dijo:
Paso el primer mes, estaba aterrada con solo imaginar que lo perdería, Carlos era un hombre fuerte ya estaba un poco agotado, pero aun trataba de alegrarme la vida, estaba muy atento, me sorprendía con rico desayuno, salíamos a pasear juntos, viajamos, sentía la esperanza de que era un error y carlos sobreviviera al cáncer.
Al segundo mes, esta más calmada, pero me sentí muy mal de salud, por tal motivo acudí al medico con Carlos, el estaba muy nervioso por mí, para nuestra sorpresa, me realicé unos análisis de laboratorio, y algo inesperado, que no sabía con reaccionar, estaba embarazada. Me realizaron el ultrasonido, tenía 9 semanas de gestación, Carlos estaba saltado de la alegría por que sería padre.
Así, pasaron 2 meses más, estábamos tan felices que olvidé lo de su enfermedad, el se portaba con caballero como siempre, atento, cariño me ayuda en la casa, me acompañaba a la consulta del ginecólogo, eramos inmensamente feliz me sentía en un sueño.
El tiempo paso volando ya habian paso 4 meses más, el parto se me adelanto para ese entonces tenia 8 meses y medio, todo salio perfecto. Nació nuestro hermoso bebe, sano y fuerte. El estaba muy feliz. Así paso dos mes disfrutando de nuestro pequeño Isaac, cuando de pronto me dijo:
Me quede muda, el tenia lágrimas en sus ojos, y yo inmediatamente le di un abrazo fuerte y lloré como una loca, nos recostamos en la cama, el me miraba fijamente con un hermoso brillo me acariciaba suavemente, me beso intensamente hasta quedarnos dormido, cuando desperté, Carlos no despertó, se había ido. Lo abrace fuerte no me quería despegar de el. Sentí un inmenso dolor quería morir. Pero no podía hacerlo tenia alguien porque luchar y vivir el hermoso e inmenso regalo queme dejo Carlos, nuestro hijo Isaac.
Han pasado tres años desde su partida, pero parece mentira, lo recuerdo como si fuera ayer lo amo con todo mi corazón aunque ya no éste a mi lado, lo recuerdo viniendo hacia mi con su inmenso amor mi amor perfecto que recordare toda mi vida.
Waoooo que historia, muy triste todo, te felicito, si es tu historia eres una mujer fuerte y dios te tiene algo muy bueno guardadito. mucha fe y confianza en él, ya que él todo lo puede.
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