Fuera de la Biblia y antes del cristianismo es muy raro el uso de la palabra apóstol, y mucho menos en su significado etimológico de Απόστολος enviado, derivado de enviar en pos de sí o de parte de.
Porque de parte del rey y de sus siete consejeros eres enviado a visitar a Judea y a Jerusalén, conforme a la ley de tu Dios que está en tu mano (Esdras 7:14)
El apóstol es pues, un enviado, destinado por Dios, quien lo envía, para propagar mediante la predicación y el testimonio la doctrina bíblica, la fe cristiana y su Poder y Amor.
El que a vosotros oye, a mí me oye; y el que a vosotros desecha, a mí me desecha; y el que me desecha a mí, desecha al que me envió. (Lucas 10:16).
Además, el apóstol es un evangelizador que tiene la misión de predicar de Jesús y de su obra redentora, su vida, su muerte y su resurrección.
Es necesario, pues, que de estos hombres que han estado juntos con nosotros todo el tiempo que el Señor Jesús entraba y salía entre nosotros,
22 comenzando desde el bautismo de Juan hasta el día en que de entre nosotros fue recibido arriba, uno sea hecho testigo con nosotros, de su resurrección.
23 Y señalaron a dos: a José, llamado Barsabás, que tenía por sobrenombre Justo, y a Matías.
24 Y orando, dijeron: Tú, Señor, que conoces los corazones de todos, muestra cuál de estos dos has escogido,
25 para que tome la parte de este ministerio y apostolado, de que cayó Judas por transgresión, para irse a su propio lugar.
26 Y les echaron suertes, y la suerte cayó sobre Matías; y fue contado con los once apóstoles. (Hechos 1:21-26)
Los apóstoles son enviados por Dios para enseñarnos la plenitud del Evangelio de Jesús.
Los primeros apóstoles fueron los doce que acompañaron a Jesús. Luego, el Señor añadió a Pablo y Bernabé.
5 y que apareció a Cefas, y después a los doce.
6 Después apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen
7 Después apareció a Jacobo; después a todos los apóstoles;
8 y al último de todos, como a un abortivo, me apareció a mí.
9 Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios.
10 Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.
11 Porque o sea yo o sean ellos, así predicamos, y así habéis creído.
12 Pero si se predica de Cristo que resucitó de los muertos, ¿cómo dicen algunos entre vosotros que no hay resurrección de muertos?
13 Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo resucitó.
14 Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe. (1 Corintios 15: 5-14).
Los apóstoles en nuestro tiempo son falsos por su naturaleza. Porque NO los necesitamos. Por el contrario, tenemos los suficientes para nuestra salvación.
Porque según pienso, Dios nos ha exhibido a nosotros los apóstoles como postreros, como a sentenciados a muerte; pues hemos llegado a ser espectáculo al mundo, a los ángeles y a los hombres. (1 Corintios 4:9).
Cuando el apóstol Pablo estaba vivo aseguró que ellos serían los últimos y que por tanto, constituían algo inigualable, por lo que debían ser disfrutados tanto por los ángeles como por los hombres. Nadie vendrá con estas características y funciones después de ellos.
Los apóstoles elegidos por Dios en los tiempos de Jesús son suficientes para enseñarnos la salvación.
Por otra parte, en nuestros tiempos tenemos un apóstol vivo Jesús.
Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús; (Hebreos 3:1)
Los que se presentan como apóstoles en esta época son falsos apóstoles porque así lo señaló Pablo.
13 Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo.
14Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz
15 Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras (2 Corintios 11:13-15)