Imaginar nos da gran placer
que no te limita ni te detiene de hacer,
nos lleva y nos trae de lugares
cada vez que lo queremos hacer.
También nos da el poder de dibujar un mundo
como lo queramos poner,
con las personas que amamos
y donde nuestros deseos podamos obtener.
La imaginación nos traslada
y hacemos cosas de valor y placer,
creamos escenarios perfectos que nos llenan de mucha calidez,
nos atrevemos y actuamos sin ningún miedo tener.
Algunas veces nos da por ser águilas
y volamos tan alto donde nadie nos pueda ni ver,
nos dejamos llevar por el viento
como si fuera nuestra última vez.
A veces somos como peces
que se desplazan por las aguas donde muchas especies llegan a ver,
allí todos conviven juntos
respetando el espacio de cada quien.
Una de las cosas que disfrutamos es hacer el tiempo retroceder,
si somos viejos o adultos, la niñez vuelve aparecer,
nos permite correr tan duro
que nadie nos puede detener.