Ayer millones de personas en Venezuela caminamos para abrir un camino diferente, más sólido, más sabio.
Mientras caminaba pensé muchas cosas y pensé en dos ausencias-presencias.
La ausencia-presencia de mis familiares que emigraron... Y un día también caminaron por un cambio.
La ausencia-presencia de mis seres queridos que ya no están físicamente pero que querían un cambio para nuestro país... Y un día también caminaron por un cambio.
Para ellos estas cortas líneas:
"Ustedes, mis queridos, también estuvieron aquí.
¡Con nosotros! No se han ido.
Tú, raíz de nuestra vida, también estuviste.
En marcha, siempre, hasta en tu reposo.
Sostén de lo bueno. Allí estuviste.
En otro país o en otra dimensión que no se ve con estos ojos, caminaron ayer al lado nuestro."
Que Dios nos proteja a todos.