Sí fuera predicador evangelico ahora diría:
AMÉN!
Es la única forma en la que lograremos sortear la barrera que nos impide seguir por el camino del bienestar colectivo y dejar atrás el individualismo capitalista que quieren vendernos. El comunismo profesaba el bienenestar colectivo por sobre el bienestar individual, tampoco hay que irse a los extremos, quizás de eso se trate este nuevo camino de las blockchains y criptomonedas, de buscar el equilibrio entre unos sistemas y otros, sacar lo mejor de cada uno y hacer un remix, tratando de minimizar las cosas malas de todos.
Un fuerte abrazo desde Argentina! :)