Esta semana el tema es la posverdad… bonita palabra ¿verdad? Si, es uno de esos neologismos que se inventan para no utilizar la palabra que realmente define lo que se quiere decir. En este caso, posverdad equivaldría a, como mínimo, manipulación o propaganda y en muchos extremos, directamente se refiere a las mentiras con apariencia de veracidad.
El mundo audiovisual se concibe por la población en general como un mero entretenimiento, pero es mucho más que eso, es un refuerzo muy notable de las posverdades históricas… es decir, nos mienten en las películas y las series diciéndonos que lo que nos cuentan es la verdad, en definitiva, nos manipulan… de eso vamos a hablar un poquito.
Pese a lo novedoso del término y a que se vincule últimamente al Brexit y Trump, lo de la manipulación y la mentira es tan antiguo como el ser humano. Lo que sucede en la actualidad es que estamos viviendo una nueva era de neo-lengua que está haciendo las delicias de los manipuladores y está provocando ictus varios a los académicos de la lengua y especialistas de distintos campos, como las matemáticas y la ciencia.
Así podemos ver como en España, por ejemplo, salen ministros de economía a contarnos que “la economía está entrando en un ciclo de crecimiento negativo”por no decir que la economía está decreciendo, no vaya a ser que la “borregada patria” se de cuenta de que vamos a la ruina. Me refiero a un ejemplo económico porque es uno de los campos donde la posverdad está haciendo el Agosto en boca de los grandes economistas y políticos de todo pelaje; pero vamos a lo que nos ocupa en esta sección, el mundo audiovisual, donde también tenemos muchos ejemplos.
El cine es una industria relativamente reciente, sus orígenes datan de la última década del siglo XIX en Francia, pero nos vamos a saltar los primeros años y pasamos directamente al período entre las grandes guerras mundiales que fue cuando tuvo su explosión de popularidad y comenzó a ser algo que todos los ciudadanos querían disfrutar. Por supuesto, en cuanto el público empezó a tener ansias de cine, hubo algún “listo” que le vió el potencial perverso a la tecnología y se dió cuenta del increíble instrumento de manipulación que estaba despertando. La gente entraba en las salas y veía las proyecciones como si de magia se tratase, todo lo que salia en esa pantalla era verdad, nadie concebía los efectos especiales. Era lógico, igual que ahora es lógico que cuando un niño pequeño se encuentre con un animal le hable como si ellos pudieran hablar… es lo que ven en la tele!!
El potencial era inmenso y la primera muestra de potencial, aunque en otro ámbito, el radiofónico, la dió Orson Welles en 1938 con su alocución radiofónica “La Guerra de los Mundos”. Eso fue un bombazo sin precedentes en EE.UU. Y seguro que terminó de convencer a los que mandaban para comenzar a utilizar los medios de masas para ir “reprogramando” las mentes de los ciudadanos.
Y así, llegamos al primer y más claro gran ejemplo de posverdad y manipulación de masas de la historia, sin contar las religiones, tema espinoso en el que no voy a entrar por respeto. Me refiero a la Segunda Guerra Mundial.
Para comenzar, recomiendo el visionado de un documental muy bueno, “La Guerra en Hollywood” que emiten en Netflix y que narra las aventuras y desventuras de los mejores directores de la época, que fueron reclutados por el gobierno estadounidense para que contaran lo que hacían sus soldados en los distintos frentes de la guerra.
Frank Capra, John Ford, John Huston, George Stevens y William Wyler fueron los seleccionados para esta misión, no por sus dotes periodísticas sino por sus dotes para presentar al pueblo lo que fuese con el punto de vista que quiera el que paga. Era pura propaganda, con tintes de realidad y mucha manipulación. El experimento fue todo un éxito en esta ocasión, más que nada porque los aliados ganaron la guerra, aunque en la campaña de Vietnam la manipulación no sirvió para mucho ya que los resultados reales de la campaña eran obvios, bolsas y bolsas de cadáveres retornando de un lugar que los estadounidenses no sabían ni colocar en el mapa.
Durante la contienda, la posverdad no tuvo un papel principal, pero posteriormente si. Hay una frase celebre que dice “la historia la cuentan los vencedores” y eso es así siempre. Se utiliza la posverdad para realzar los éxitos y minimizar los fracasos. Hay un gráfico que circula por Internet hace tiempo y que expresa en una simple imagen todo el potencial que tiene la manipulación de la opinión pública.
En el mismo podemos observar como, con el paso de los años, los franceses fueron perdiendo la noción de la realidad vivida y sustituyendola por una posverdad fabricada para potenciar a un contendiente en detrimento de otro. En este caso EE.UU. y Rusia.
Todos los que tenemos una determinada edad recordamos como tuvimos épocas de “bombardeo” de cine bélico de EE.UU. Donde nos contaban lo héroes que fueron y lo inútiles que parecían todos los demás. Es cierto que, desde Europa, tenemos que dar gracias a los USA por ayudarnos a deshacernos del nazismo… desde España habríamos agradecido también que hubieran terminado con el único régimen fascista que se dejaron “vivo” en Europa, el de Franco, pero eso es otro tema …
Uno de los episodios más relevantes y más manipulados de la historia fue el del Dia D, el desembarco de Normandia. Todos tenemos claro que fue una proeza increíble y que supuso el sacrificio de miles de valerosos soldados de distintas partes del mundo, Australia, Canadá, Reino Unido… Todos conocemos las zonas de playa Utah y Omaha, pero poca gente sabe de la existencia de Gold, Juno y Sword. Esto se debe al cine y las películas bélicas que la factoría de posverdades de Hollywood no para de ejecutar de una forma casi en cadena. Bien, pues ahora toca documentarse un poco y para ello recomiendo un documental de National Geographic sobre lo acontecido ese día en las playas del norte de Francia.
Yo descubrí muchas cosas con él y, cambió en cierta forma, mi percepción construida con los datos que me iban dando el cine y la televisión sobre lo que fue esa guerra y me hizo darme cuenta del inmenso poder de manipulación que tiene el medio audiovisual. Eso en aquellos años donde los efectos especiales eran primitivos y “cantaban” a la legua. Hoy por hoy, el poder es infinito, si mañana se proponen hacernos creer que la tierra es plana y nos enseñan unas imágenes retocadas por ordenador, sería imposible detectar la falsedad a simple vista y en un par de generaciones como mucho, la tierra sería plana sin remedio… a día de hoy aun hay algunos que lo dicen por youtube, pero se les ignora y ya esta.
Me he centrado en, el que creo que es, uno de los ejemplos más claros que existen a día de hoy sobre la posverdad en el mundo audiovisual y no me quiero extender en exceso. Como siempre, hago un llamamiento para que completemos el tema entre todos y pongan ejemplos que conozcan de películas o series que, claramente, sirven para confeccionar una realidad paralela basada en la posverdad o manipulación para los amigos.
Downvoting a post can decrease pending rewards and make it less visible. Common reasons:
Submit
Gracias por tu comentario!!
La propaganda Nazi fue famosa por su efectividad...el Goebbels ese era un cerebrito, para el mal y la destrucción, pero un maestro de la manipulación humana.
Downvoting a post can decrease pending rewards and make it less visible. Common reasons:
Submit