Los matrimonios arreglados NO son válidos para Dios, ¿por qué?, porque están fuera de la ley de Dios.
Estos matrimonios por conveniencia, costumbre, o por dotes ofrecidas entre sus padres no fueron avalados por ambas partes, y por lo tanto el "juramento" de unión entre ambos no existe.
Es importante no pecar cuando sabemos que algo está mal, y no jugar con la gracia y la misericordia de Dios, pues entonces no seremos perdonados y seremos tomados como pecadores.
El matrimonio es una constitución de unión entre una pareja, y lo que Dios une que no lo separe el hombre.