ROGER KANE: EL INMORTAL || Relato || Rincón literario

La existencia del ser humano es tan amplia que diverge en numerosos caminos aunados a un millón de posibilidades, todas con un único final: La muerte.

Roger Kane un viejo solitario quién llevaba algunos años retirado de la música después de una larga trayectoria sentía que su vida había pasado en vano, aunque logró consagrar gran fama y fortuna, veía inerte como sus días se desvanecían con el pasar de los minutos.

Un día cansado de la monotonía, comenzó a leer libros sobre la vida, la muerte, el tiempo y la inmortalidad, inclinando su interés por esta última. Kane pensó que podría encontrar una manera metafórica de volverse inmortal… Siendo algo imposible ¿Qué le condujo a pensar de esa forma?

Este hombre pasó mucho tiempo de su vida trabajando y cada año que pasaba su crecimiento profesional era mayor, pero nunca se detuvo a apreciar las cosas genuinas que nos regala la vida. Se casó y se divorció un par de veces, no tuvo hijos y su lista de amigos era decadente. Probablemente la soledad fue lo que hizo que él se obsesionara por alargar su tiempo en la tierra, tenía temor de llegar al final de su vida sintiéndose sólo y vacío.

¿Qué valor puede tener el tiempo para un inmortal? Fue la pregunta que cambio las perspectivas de aquel hombre que se rehusaba al concepto de la muerte.

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El ser que encuentra el modo de burlar su propia muerte se despoja del tiempo, pero se convierte en prisionero del espacio… Roger ya estaba cansado de sentirse encerrado, definitivamente prolongar su vida de ese manera no era lo que necesitaba.

En cambio la muerte, si así lo deseamos, es lo que da sentido a la vida, saber que cada minuto vivido puede ser el último, nos enseña el verdadero valor del tiempo, y nos da una idea de cuál es la mejor forma para aprovecharlo.

Así fue como le dio a su existencia un giro de 360 grados: Halló la belleza en lo común… se reencontró con las cosas que un día le hicieron feliz, le dio valor a su trabajo puesto que con su música tocó el alma de muchas personas. Se reconcilió con el amor propio que había perdido años atrás, dedicó tiempo y cariño a las pocas personas que lo rodeaban, le querían y admiraban, fue así como entendió que no existe la inmortalidad para su cuerpo, pero que algún día su alma sería inmortal si le daba a su vida nuevos propósitos.