*¡knok knok knok! -- Suena la puerta de la central de correos mientras se desliza una carta por debajo
-- ¿uh? ¿quién diablos envía una carta tan tarde en la noche?
¡Brrrrruuuuum! -- suena un estruendo ensordecedor
¿Esperabas que callara
mientras armabas tu plan?
¿Esperabas subordinarme
tan fácil y sin chistar?
Buscando apoyo conseguiste siamés,
cambiaste por una vida otras diez
se van tus salvoconductos,
lo que era comodín
ahora es un fallo abrupto
en tu torcido ciclo sin fin.
No caeré en tu bruta influencia
no desafíes mis leyes,
no contradigas mi ciencia
pues seguro te estrelles,
no te crezcas,
no te creas más fiera,
pues tú y yo,
somos la misma madera,
te creíste poderoso,
estabas equivocado,
tu mandato ostentoso,
te tiene cegado.
Hoy no esperes nada,
hoy mi ira quema,
hoy jugaste tu suerte
y de mi obtuviste candela.