Este fin de semana, nos trasladamos a la provincia de Huesca, a pasar el sábado por los Pirineos Aragoneses (Oscenses).
Se trataba de realizar una ruta muy sencilla ya que íbamos acompañados de niños y mayores (unos tíos mis que no están muy acostumbrados a patear por la montaña).
• Dificultad: Fácil
• Distancia recorrida: 3.47km
• Altitud máxima: 1.248m
• Desnivel subiendo acumulado: 102m
• Duración 1h20mi con niños y abuelos
Salimos no muy temprano desde la localidad de Huesca en dirección a Hecho y de ahí a la selva de Oza. Dejamos los coches en un parking bastante ancho que nos encontramos a la llegada.
Desde el mismo parking comenzamos nuestra ruta por asfalto durante unos pocos metros, hasta llegar a la pista donde comienza la rutita que vamos a realizar.
Nada más llegar, al dejar los coches, dejo salir a Blas perro para que se desfogue un poco después de la casi 1h30min que hemos tardado en coche en llegar hasta aquí. Lo primero que hace el desustanciado es irte al prado de alado y rebozarse en la primera mierda de Vaca o caballo que se encuentra. Prrrrfffff, empezamos bien!!!
Tras limpiarlo un poco, comenzamos la ruta un buen tropel de gente, entre niños abuelos, primos, y demás familia.
A poco menos de 1km de empezar la ruta, ya nos encontramos con una paleta que nos indica “LA CORONA DE LOS MUERTOS” desvío que tomamos para ir a verlas. Este trocito de senda, que se aparta de la pista tiene su encanto, y más en esta época del año en el que podemos ver todas las hojas del otoño caídas por el bosque.
A pocos metros, llegamos a la corona de los muertos, que son piedras funerarias prehistóricas colocadas en forma de corona en el suelo, según nos explica nuestro guía Sergio, que ha sido el encargado de buscar esta sencilla ruta.
Tras dar un pequeño giro, hacernos unas fotos en familia, jugar con las hojas otoñales, regresamos a la pista para continuar por la pista y realizar la ruta.
Se trata de pista en la mayor parte del recorrido, en ligera ascensión muy suave. Justo hasta llegar a una paleta señalizadora que nos indica el desvío en Dirección Oza por sendero. El cual desciende todo lo que habíamos subido por senda hasta que llegamos finalmente al rio junto al parking donde habíamos dejado los coches. Lugar en el que mi padre aprovecha para mojarse los pies en el agua y los pequeños a tirar piedras.
Justo aquí podemos ver un panel que nos muestra diferentes rutas que podemos realizar desde aquí, a mí me queda pendiente subir al “CASTILLO DE ACHER” ruta que me apunto para realizar en cuanto pueda, seguramente después del invierno o para navidades siempre que no haya nieve.
Una vez terminada la pequeña ruta, nos montamos nuevamente en los coches y nos dirijimos a la Localidad de Ansó, pasado el pueblo, a unos 12km y tras sortear abejas y vacas que nos vamos encontrando por la carretera, llegamos a la Borda “O’chiquin” dispuestos a comernos unas deliciosas migas, que era la finalidad de este sábado.
Aquí divididos en 3 mesas por generaciones, niños, padres y abuelos, nos zampamos unas deliciosas migas con setas (muy recomendables) lo único malo, es que las comimos al rancho y no controlas la cantidad que comes y claro…. Empachado que me volví para casa, además de segundo pedimos estofado de ciervo, es cual no es un plato ligero… todo buenísimo pero nos pasamos de cantidad.
Después de una pequeña sobremesa, dimos por terminada la jornada y cada uno regresó a su casa por libre.
Espero que os haya gustado. Saludos
Oscar y Blas Perro
En esta ocasión acompañados por la familia Oscense y de Zaragoza.