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Las personas cuando estamos jóvenes nos gusta el hecho de “vivir la vida al máximo”, rumbear hasta tarde, comer lo que queramos, viajar gastando todo el dinero que tienes y tomar alcohol hasta decir “basta”. Pero no pensamos en las consecuencias que eso nos puede traer a futuro, en este post hablare acerca de una de las consecuencias, como lo es la hipertensión arterial.
La hipertensión arterial es el aumento de la presión arterial de forma crónica con valores iguales o superiores a 140 mm de Hg (mercurio) de presión sistólica y 90 mm de Hg de presión diastólica. La HTA es un factor de riesgo cardiovascular. La presión arterial se puede elevar sin una causa previa conocida, por algunas enfermedades (endocrinas, renales, etc.), por el consumo de algunos fármacos y por el abuso del alcohol, el tabaco, la cantidad de estrés, el sobre peso, la falta de ejercicio y por consumir cantidades exuberantes de sal.
La forma más sencilla de combatir esta enfermedad es no colocarles sal a los alimentos, sobre todo a esos alimentos de elaboración rápida o precocinados como: cubitos de caldo, empanadas, pizza, jamón serrano, jamón cocido, papitas fritas, embutidos, etc.
Algunas medicinas tienden a llevar un alto contenido de sodio (sal) la cual si se sufre de la tensión es recomendable no ingerir y buscar otra solución.
Para que tus comidas no queden desabridas existen sustitutos de la sal para una carne puedes emplear laurel, nuez moscada, pimienta, salvia, tomillo, ajo, cebolla, orégano o romero. En el caso de los pescados, suele irles mejor curry en polvo, eneldo, mostaza, zumo de limón o pimienta. Y para los vegetales, lo más apropiado es romero, salvia, eneldo, canela, estragón, albahaca o perejil.
Después de todo este proceso se aconseja comer alimentos bajos en sales como verduras, frutas, legumbres, pescado, aceite de oliva y alimentos que contengan poca grasa. El alcohol y sustancias excitantes como la cafeína producen un aumento de la presión arterial. Por ello, se aconseja limitar su ingesta.
Por último y no menos importante es recomendable hacer ejercicio al menos una hora al día, bien sea en un gimnasio, trotando o pedaleando en la calle, practicando algún deporte o en tu casa viendo videos fitness.
Recordemos la vida es corta no la hagamos más corta por no querer cuidarnos a nosotros mismos.