Porque soy feliz con poco
¿Quién Soy?
Soy el Señor Manny, y estoy aquí para llevarte a un viaje que no olvidarás. Desde siempre, he tenido una pasión por las historias que te hacen cuestionar la realidad, esas que te dejan con la sensación de que algo más está ocurriendo, incluso después de que terminas de leer. Mi objetivo es sencillo: quiero que te pierdas en mundos que parecen demasiado reales para ser solo ficción, que sientas que los personajes que te presento siguen viviendo sus vidas mucho después de que cierras el libro o la pantalla.
¿De dónde salí?
Todo comenzó cuando era niño, creando cómics de personajes como los Looney Tunes, aunque con un giro mucho más oscuro y retorcido. ¿Te imaginas a los conejitos en una guerra o a gallinas enfrentando mafias? Pues esas eran mis primeras historias. Mientras otros niños soñaban con finales felices, yo encontraba una belleza particular en lo sombrío, en lo que no se resolvía tan fácilmente. Con el tiempo, mi amor por lo macabro creció, alimentado por las palabras de maestros como Stephen King, H.P. Lovecraft, Brandon Sanderson y Joe Abercrombie. Ellos me enseñaron que las mejores historias son aquellas que no solo entretienen, sino que también te dejan una marca.
¿A qué me dedico?
Me dedico a ser un testigo de lo oculto, a escuchar las historias que susurran desde la oscuridad y luego compartirlas contigo. Mi misión es simple: quiero que veas lo que yo veo, que sientas lo que yo siento cuando exploro esos rincones oscuros del mundo y de la mente. Te llevaré a lugares que otros no se atreven a visitar, y lo haré con la esperanza de que, al igual que yo, encuentres una extraña belleza en lo que muchos temen.
¿A quién me dirijo?
Esto es para ti, que no le temes a lo desconocido. Para ti, que prefieres una historia que te haga pensar, que te desafíe y te lleve al borde del abismo, en lugar de una que te ofrezca una solución fácil. Escribo para los curiosos, para los que disfrutan de explorar lo que está más allá de la superficie. Si te gusta la idea de adentrarte en mundos llenos de misterio, de enfrentar tus miedos a través de las palabras, entonces estás en el lugar correcto.
¿Qué puedes esperar de Mí?
En este blog, voy a compartir contigo relatos de fantasía oscura, terror y suspenso, historias que te harán cuestionar lo que sabes. Además, encontrarás poemas que exploran los rincones más oscuros de la mente, y análisis de otras obras que me han inspirado a lo largo del camino. Mis pensamientos filosóficos también tendrán su lugar aquí, porque a veces, una idea puede ser tan inquietante como una historia de terror.
Le daré voz al inconsciente
Mi proceso creativo se alimenta de las pesadillas, de esos momentos en los que la realidad se difumina y lo desconocido comienza a tomar forma. Me inspiro en los mitos, las leyendas y en esos pequeños miedos que todos llevamos dentro pero que rara vez admitimos. Aquí, cada relato es un intento de capturar lo que no se puede ver, solo sentir.
Abriré la puerta a los mundos de mi mente
Te invito a entrar en mi imaginación, a caminar por esos lugares que he creado, donde lo hermoso y lo aterrador se encuentran en un delicado equilibrio. Aquí, los monstruos tienen historias que contar, y los héroes no siempre ganan. Quiero que experimentes la belleza y la oscuridad que yo veo, y que, a través de mis palabras, te adentres en esos paisajes que desafían la realidad.
Te presentaré mi visión de la fantasía oscura
Mis cuentos son mi manera de explorar lo que significa enfrentarse a lo desconocido. Además, te recomendaré obras y autores que admiro, aquellos que han dejado una huella en mi forma de escribir. Aquí no solo leerás historias, sino que también te invitaré a reflexionar, a cuestionar y a temer lo que podría estar esperando en la próxima página.
¿Listo para el viaje?
Este es solo el comienzo. Te invito a seguir este blog, a ser parte de un viaje que te llevará a lugares que no has imaginado. Prometo mantenerte entretenido, pero más que eso, te prometo que lo que encontrarás aquí te dejará con ganas de más. Mantente al tanto, porque las historias que compartiré contigo son solo la punta del iceberg. ¿Estás listo para lo que viene? Sí tu respuesta es “Sí” entonces permíteme mostrarte un breve relato el cual encuentro especialmente interesante, dejando entrever un atisbo de lo que vendrá, acompáñame a descubrir las oscuras maravillas que puede contarnos…
Era de pocas palabras, tan pocas que muchos llegaron a pensar que era mudo. En realidad, no le gustaba conversar; solo decía lo estrictamente necesario. El resto del tiempo se dedicaba a observar, a captar pequeños detalles que la mayoría pasaba por alto...
Al prestar atención a lo invisible para otros, comenzó a acumular más temas de los que podía hablar. Así, su mayor interés se convirtió en aprender, en encontrar las palabras correctas para dejar de ser simplemente un niño extraño...
Conforme creció, cada experiencia se transformó en un experimento, cada encuentro, cada persona que conocía, cada lugar que visitaba se convirtió en su objeto de estudio. Practicó expresiones faciales, palabras populares, actitudes y reacciones. Para cuando alcanzó la adultez, era imposible decir que había algo extraño en él, pero la realidad era diferente...
Durante todos esos años de preparación, sin darse cuenta, terminó interpretando un papel, fingiendo ser una persona como las demás, cuando en realidad era un ser peculiar, un individuo excéntrico. Y ahora que había aprendido a actuar como los demás, se preguntó cómo sería actuar como él mismo. Pero, ¿quién era él...?
Su pensamiento cambió de enfoque. Ya conocía lo que hacían las personas; ahora debía aprender por qué lo hacían. Al descubrir que detrás de cada acción había un motivo, desveló el espectro emocional y las maravillas de la mente humana. Se convirtió en un erudito, ya que cada dato y cada detalle podían hacer que el simple hecho de prestar atención fuera fascinante...
Aprender sobre las acciones y emociones de los demás lo llevó a reflexionar sobre las suyas propias. Poco a poco, cuanto más aprendía de sí mismo, menos necesitaba interpretar un papel. Aprendió a sentir, a pensar, a intuir, y con el paso del tiempo, aprendió a relatar...
El mundo del cual formaba parte le quedó pequeño de un momento a otro. Su mente comenzó a crear sus propios mundos, mundos fantásticos, complejos y extraños, donde el único límite era su imaginación mortal... pero en estos mundos también había sombras, criaturas que susurraban secretos oscuros, y caminos que llevaban a abismos insondables.
Así fue como, justo después del año oscuro, aquel que en un principio fue un niño extraño se convirtió en Aquel que Relata...
Y si alguna vez sientes que no perteneces a este mundo, coméntalo, y con gusto enviaré a mis expertos para enseñarte a observar los detalles ocultos de la vida, aquellos que se esconden entre las sombras...
Mientras tanto, me retiro para escribir una nueva historia. Porque además de ser feliz con poco, Yo... soy Aquel que Relata.