Hola mi estimados lectores.
Espero estén muy bien, por acá en Barquisimeto-Venezuela hace un calor fuertísimo, no se como este el resto del país, pero a pesar de los 30ºC bajo sombra aquí estoy para traer a ustedes un nuevo post.
Hace aproximadamente un año comencé a realizar una serie de obras de pequeño formato que tenían que ver con un jardín, el de mi mamá, cada vez que salía al pequeño patio observaba todo el jardín con detenimiento aprovechando cada centímetro del mismo, es increíble lo que uno puede descubrir a través de la observación, aunque la mayoría de las personas solo miren las flores o alguna planta no común, yo me quedaba largo rato contemplando aquel ecosistema donde la vida cumplía su siclo y descubría insectos no antes vistos.
Una mañana me acerque a una de las plantas, conocida como Corona de Cristo, y vi que su belleza tenía un singular atractivo, busque mi block y lápiz e hice un boceto pero no vi allí lo que mis sentidos percibían, así fue como decido, hacer una pequeña obra sobre cartulina pero pintada al óleo. Dure como unas 12 horas distribuidas en 3 días frente a la planta y logre un buen resultado, así fue como inicie la serie, aunque faltan todavía unas obras por terminar ya que el tiempo y mis otros proyectos no me han permitido concretarlas. Pero aquí les presento aquellas que me permitieron aprender el mundo infinito de VIDA que hay en tan reducido espacio.
Autor: Wilmer Guédez (WAGO)
Técnica: Óleo sobre cartulina.
Medidas: 29,5 cm X 20,5 cm.
Fecha: 2017-2018
Serie: El jardín de mi mamá.