La Organización Miss Venezuela rompió el silencio y sacó un comunicado en el cual expresa que “no tienen conocimiento de los hechos descritos, ni están involucrados en ninguna de las actividades que sus empleados, candidatas, asesores, representantes o asociados realicen fuera de las acciones propias del concurso”.
Esto debido a las más recientes acusaciones que han llovido y que han revelado lo que –supuestamente- ocurre dentro de la Quinta Miss Venezuela, donde funcionaría una red de trata de blancas y prostitución que mercadea a las futuras aspirantes a reinas de belleza.
Exmisses como María Gabriela Isler, Vivian Sleiman, Annie Fuenmayor, Hannelly Quintero, Annarella Bono y Migbelis Castellanos han revelado detalles sobre lo que ocurría durante la presidencia de Osmel Sousa y que han salpicado a la profesora de pasarela, Giselle Reyes, como la encargada de establecer los contactos entre las chicas y sus futuros patrocinantes.
En su comunicado, Cisneros Media y Venevisión -empresas responsables del concurso- informan que se “se encuentran enfocados en la reestructuración de la Organización Miss Venezuela y la conformación de un Comité Directivo comprometido en llevar de manera profesional la formación de talento con belleza interna y externa, capaz de competir con éxito en cualquier escenario nacional e internacional; así como en continuar brindando entretenimiento de calidad para todos los venezolanos”.