Si estás leyendo esto, eres uno de los míos. Todos quienes buscamos clientes es porque necesitamos monetizar nuestro emprendimiento o nuestro negocio.
Cuando el bolsillo está contento, la mente también lo está. Puedes dormir tranquilo, no hay angustia ni ansiedad por no tener flujo de caja. Recuerdo cuando empecé mi primer negocio por instagram, fue en 2013 y me hacía mucha ilusión que todo quien me iba siguiendo preguntara por mi producto o servicio y terminara siendo un cliente que me pagara por mi producto. Esto, definitivamente no fue así.
Aquí recae la importancia de saber convertir tus seguidores en clientes, métodos para atraer masivamente a tus prospectos potenciales (no a cualquiera, sino previamente filtrado). Luego de atraerlos que entren en una estrategia previamente dieñada y pensada para convertirlos en clientes y que te compren tu primer producto.
El emprendedor no está para jugar al emprendimiento, sino que necesita cobrar pero hay que ser cuidadosos porque justamente la necesidad se nota y el cliente lo percibe. Un vendedor profesional resuelve problemas importantes para el prospecto pero un vendedor que no lo es, sólo vende para su propio beneficio.
Debemos ser éticos en las ventas y nuestro negocio será siempre fluido, gozaremos de una audiencia sana que está hablando bien de ti siempre en la calle.
La misma energia que gastamos en improvisar en nuestro negocio la podemos usar para planear estrategias de ventas, para evitar desgaste y frustraciones.
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