Friday the 13th (Viernes 13) es una de las franquicias más famosas dentro del subgénero del cine de terror conocido como “slashers”. Dicha saga ha sido (como muchas de su género y época) realmente irregular en cuanto a calidad general, pero es innegable que el aspecto de Jason Voorhees, enorme, callado, armado con cualquier cosa (machete, hacha…) y con el rostro cubierto por una máscara de hockey se ha vuelto tan inolvidable como otros grandes del terror.
La historia de Jason es bastante trágica, ya que era un niño algo deforme y retrasado que sufrió acoso por parte de sus compañeros de campamento y que terminaron ahogándolo en Crystal Lake. Y es precisamente ahí donde suele reaparecer este personaje año tras año para matar a los desprevenidos que se atrevan a estar por la zona.
Hace unos años apareció un juego sobre esta saga llamado Friday the 13th: The Game, pero en esta ocasión voy a hablar del juego aparecido en 1989 para NES.
Cuando Atlus desarrolló el juego, intentó representar algunas de las situaciones que forman parte de las películas e incluso tomó elementos secundarios de las mismas y les dotó de más importancia. Hasta cierto punto logró su propósito bastante bien, ya que nosotros controlaremos a los trabajadores del campamento Crystal Lake y tendremos que apañárnoslas para sobrevivir a los ataques de Jason y al mismo tiempo tratar de defender al grupo de niños indefensos que hay en él. En este juego tendremos que armar a los personajes, ayudarlos entre sí y tratar de sobrevivir a los ataques aleatorios de Jason, de manera que nos encontramos ante uno de los primeros juegos que encajarían en el término "Survival Horror".
El hecho de que Atlus hiciese (a mi parecer) un buen trabajo a la hora de transmitir lo que sienten las víctimas de Jason en las películas, no significa que haga que el juego sea maravilloso. De hecho tiene más sombras que luces, algunas de las cuales se podrían haber corregido fácilmente.
Los gráficos de este juego están en el término medio entre algo bueno y algo malo, así que supongo que podemos decir que como mucho, son mediocres. La ilustración inicial con la máscara de Jason es bastante buena, pero el apartado gráfico general es muy sencillo, los colores son planos y bastante mejorables (Jason vestido de lila con la máscara azul, cuando perfectamente le podían haber puesto la ropa gris y la máscara blanca…).
Enfrentándonos a Jason en una de las cabañas
La variedad de escenarios no es muy grande (campamento, bosque, lago y cueva) pero supongo que poco más se podía hacer con la temática de Crystal Lake. Los interiores de las casas son todos iguales, lo cual hace que sea más fácil confundirse (al menos podían haber cambiado el color). Los enemigos no son gran cosa (zombis, lobos, murciélagos, cuervos) pero hay que admitir que las apariciones de Jason dentro de las casas (el sprite es grande e intimidante, además puede aparecer con diferentes armas) y el sprite de la cabeza amputada de Pamela Voorhees no están nada mal.
George huyendo de un zombi
Afortunadamente, la música de Friday the 13th sube un poco la calidad general del juego, ya que es inquietante y siniestra, de manera que nos mantiene en tensión durante la partida y encima cambia cuando nos enfrentamos a un jefe.
La alarma que suena cuando Jason ataca a alguno de los protagonistas o a los niños pequeños de la cabaña del lago es tremendamente irritante, hace que sea muy difícil de ignorar. Incluso si hemos decidido que no vamos a ayudar a quien esté en peligro, el mero hecho de que esté sonando y ver el tiempo que nos queda para ayudar a la víctima es una tentación constante de ir a salvarle y terminar con el molesto ruido de alarma. Así que el apartado sonoro, sin tener composiciones excelentes ni ningún alarde dentro de lo que la consola de 8 bits de Nintendo podía dar, me parece casi perfecto para un juego de estas características.
El apartado sonoro y el gráfico son importantes para mejorar la experiencia de juego, pero la verdadera prueba de fuego está en su jugabilidad y es ahí donde Friday the 13th muestra su peor cara, ya que este juego es tan irregular y poco intuitivo, que requiere muchísimo tiempo para poder ser disfrutado, debido a su extraño desarrollo, que trataré de explicar a continuación.
Remando para llegar a la cabaña donde están los niños
El juego en sí se desarrolla en 3 días (cada uno con diferentes etapas de día y noche) y nuestra misión es matar a Jason las 3 veces. Cada vez que lo enfrentemos, al hacerle suficiente daño desaparecerá, de manera que no podremos matarlo hasta lograr armas mejores (como la antorcha o la horca).
Al iniciar el juego sale un mensaje que nos dice que usemos la antorcha para encender las chimeneas, pero es un error, lo que hay que usar es el mechero y en cuanto hayamos iluminado suficientes chimeneas encontraremos la antorcha y la linterna (que nos permitirá ver caminos ocultos en la cueva). También podremos encontrar notas escritas en las cabañas conforme vayamos avanzando, algunas tienen pistas interesantes, otras no.
Así pues, iniciamos el juego eliminando zombis a pedradas y consiguiendo mejores armas (el cuchillo, el machete), pociones (para curar a los personajes), llaves (para abrir las cabañas secretas de la cueva y el bosque) y el mechero (que como dije, nos permite encender las chimeneas). Estos objetos aparecen con más frecuencia si matamos enemigos y saltamos como tontos. Las pociones aparecen con mucha más frecuencia en el bosque (donde también es más posible encontrarnos cara a cara con Jason).
Encontronazo con Jason en el bosque
Si presionamos START veremos el mapa, con casas grandes (tienen chimeneas) casas pequeñas (podemos cambiar de personaje en ellas) y las 3 casetas del lago, donde hay niños.
Mientras jugamos sonará una alarma. Si presionamos START, una de las casas del mapa debe estar parpadeando. Puede ser una de las casas donde hay uno de nuestros personajes o las 3 casas de los niños pequeños.
En ese momento podemos ir hacia la casa para enfrentarnos a Jason y espantarlo, o introducirnos en una casa pequeña y allí presionar START para elegir a otro personaje que esté más cerca de la casa atacada por Jason o ignorar la alarma y aceptar que alguien va a morir. Si Jason mata a uno de nuestros personajes, lo perdemos junto con todos sus ítems. Si va hacia las casas de los niños, matará a 5 de ellos y se marchará. Como hay 15 niños, le costará tres ataques acabar con todos, pero si eso sucede, iremos a la pantalla de Game Over. Mientras más tardemos en ayudar a alguien, más daño sufrirá (los trabajadores del campamento irán perdiendo vidas y el número de niños irá bajando poco a poco).
Mapa del juego
Al intentar llegar a la casa donde está Jason descubriremos que el movimiento de nuestro personaje y su ubicación en el mapa es bastante extraño. El juego está representado en 2 dimensiones, pero el mapa tiene varias formas circulares, de manera que si andamos por una dirección durante mucho tiempo, nuestro personaje estará andando en círculos, así que puede que pese a andar a la derecha, en el mapa se mueva hacia la izquierda.
Es algo difícil de explicar, pero creo que la mejor manera de entenderlo es esta: Mirad el mapa, si vuestro personaje está en la parte inferior de la circunferencia, su movimiento en el juego será el mismo que en el mapa (ósea si vais a la izquierda, en el mapa se moverá a la izquierda). En el momento en el cual estáis en la parte superior de la circunferencia, su movimiento será opuesto (si vais a la izquierda en el juego, será la derecha en el mapa). Recomiendo ir pausando cada vez que vayáis a cambiar de dirección para confirmar vuestro camino hasta que os hayáis acostumbrado.
En momentos concretos veremos caminos hacia arriba o abajo que nos permitirán pasar de una parte del mapa a otra (ojo, la cueva y el bosque no tienen mapa, ahí dependéis de vosotros mismos).
Una vez llegamos a la cabaña, entraremos dentro y veremos que la vista cambia totalmente. Para navegar por dentro de la casa sin confundirnos lo mejor es que usemos derecha e izquierda para mirar alrededor, adelante para avanzar y atrás para darnos la vuelta. En una de las habitaciones aparecerá Jason y nos enfrentaremos a él en una especie de versión extraña y poco precisa de Punch-Out. Para evitar los ataques de Jason nos podemos mover a la derecha o izquierda, pero lo más efectivo es presionar la diagonal izquierda-abajo o derecha-abajo y atacarle cuando se aleje, si lo hacemos bien, Jason huirá.
Explorando una cabaña
Si entramos en una cabaña donde hay otro de nuestros personajes, podremos intercambiar armas entre ellos o usar las pociones para curarles. Las pociones también se activan automáticamente si nos quedamos sin vida.
Este es el proceso general del juego, pero claro, hay más cosas, como la posibilidad de encontrar una cabaña oculta en la cueva o en el bosque, y que nos enfrentaremos a la cabeza amputada de Pamela Voorhees y encontraremos nuevas armas o un suéter de lana (que nos protegerá hasta cierto punto de Jason, ya que parece que no está convencido de atacar a alguien que lleva el suéter de su madre).
Como veis, el desarrollo del juego es un tanto raro y muy poco intuitivo, además algunas de las decisiones tomadas por los desarrolladores lo hacen más complejo y frustrante de lo que debiera ser, pero una vez sabes lo que tienes que hacer, mejora bastante.
Nuestros personajes no se controlan mal mientras nos movemos por exteriores, pero cuando nos enfrentamos a Jason dentro de las casas, puede llevarnos un tiempo aprender a derrotarle, pues el personaje tiene cierto retraso a la hora de agacharse y atacar.
Peleando contra Pamela Voorhees
Si sabemos exactamente lo que hacer y lo hacemos bien, podemos completar este juego en menos de 45 minutos. Sin embargo, para llegar a tener todo ese conocimiento y habilidad, son necesarias muchas horas explorando Crystal Lake y buscando estrategias para que tanto nuestros personajes como los niños sobrevivan a los ataques aleatorios de Jason. Además, conviene aclarar que cada personaje tiene sus propios valores de velocidad, salto y fuerza para remar, de manera que hay que intentar que no maten a los mejores.
Lo que realmente dificulta el juego no es solo la enorme cantidad de vida que Jason quita a tus personajes cuando les golpea, si no el hecho de que tenemos que hacer algunas misiones concretas para poder obtener mejores armas y estas se ven interrumpidas constantemente por las alarmas de ataque de Jason, lo cual nos obliga a tomar la decisión de completar lo que estamos haciendo y dejar que mate a un personaje o tratar de salvarlo y luego continuar. Esta situación se repetirá constantemente, logrando que nos estresemos y cometamos errores tontos, que nos precipitarán a la mítica pantalla de Game Over de este juego (Tú y tus amigos estáis muertos, GAME OVER).
Para ver en la cueva necesitamos la linterna
Así pues, no es un juego largo, pero es bastante difícil moverse por él y avanzar, iremos mejorando muy poco a poco hasta lograr matar a Jason, que no dejará de acecharnos (a veces incluso os lo encontraréis delante de vosotros sin previo aviso), lo cual transmite bastante bien la tensión y el nerviosismo de las películas, con la excepción de que esta vez la supervivencia depende de nosotros.
Este juego ha sido considerado en más de una ocasión uno de los peores de NES, algo bastante discutible en mi opinión, pero al mismo tiempo es innegable que tiene algunos problemas importantes en su diseño (el movimiento errante de los personajes por el mapa, la navegación en las casas, la aparición aleatoria de items, Jason atacando cada 10 segundos…) que pueden llegar a hacer que el jugador medio lo deseche en menos de media hora y no lo quiera volver a jugar.
Así que solo los amantes del cine de terror (que disfrutarán de su tensión y temática) y todos aquellos que se sientan atraidos por descubrir la manera de acabar con Jason o buscar todos los secretos de Crystal Lake, puede que terminen disfrutándolo cada vez más, ya que es bastante único en desarrollo y temática.
Publicado desde combogamer.com mediante SteemPress : https://www.combogamer.com/35787/jugando-a-friday-the-13th-1989/