El sorprendente número de casos de crueldad hacia los animales reportados cada día es solo la punta del iceberg; la mayoría de los casos nunca son reportados. A diferencia de los crímenes violentos contra personas, los casos de abuso de animales no son compilados por agencias estatales o federales, por lo que es difícil calcular cuán comunes son. Sin embargo, podemos utilizar la información disponible para intentar comprender y prevenir los casos de abuso.
¿Quién abusa de los animales?
La crueldad y el abandono cruzan todos los límites sociales y económicos, y los informes de los medios sugieren que el abuso de los animales es común en las zonas rurales y urbanas.
La crueldad intencional contra los animales está fuertemente correlacionada con otros delitos , incluida la violencia contra las personas.
El comportamiento de acaparamiento a menudo victimiza a los animales. Las personas que padecen un trastorno de acaparamiento pueden imponer una negligencia grave a los animales al alojar mucho más de lo que pueden cuidar adecuadamente. El grave descuido de los animales (como el acaparamiento ) a menudo es un indicador de personas que necesitan servicios de salud social o mental.
Las encuestas sugieren que aquellos que abusan intencionalmente de animales son predominantemente hombres menores de 30 años, mientras que aquellos involucrados en el acaparamiento de animales son más propensos a ser mujeres mayores de 60 años.
Las víctimas más comunes:
Los animales cuyo abuso se informa con mayor frecuencia son perros, gatos, caballos y ganado . Basado en los 1,423 casos de crueldad de EE. UU. En el resumen 2011 de pet-abuse.com en el que se especificaron las especies de la víctima:
70.1% de perros involucrados.
20.9% involucró gatos.
24.1% involucró a otros animales.
Investigaciones encubiertas revelaron que el abuso animal abunda en la industria agrícola industrial. Pero debido a las débiles protecciones otorgadas al ganado bajo las leyes estatales de crueldad, solo se denuncian los casos más impactantes, y pocos son enjuiciados. Descubra cómo puede ayudar a proteger a los animales de granja aquí .
Crueldad organizada
Las peleas de perros , las peleas de gallos y otras formas de crueldad animal organizada van de la mano con otros crímenes, y continúan en muchas áreas de los Estados Unidos debido a la corrupción pública.
La HSUS documentó a oficiales de policía uniformados en un hoyo de peleas de gallos en Kentucky .
La Agencia Antidrogas de EE. UU. Ha enjuiciado múltiples casos en los que los cárteles de la droga usaban narcóticos a través de las peleas de gallos y las operaciones de peleas de perros.
Decenas de homicidios han ocurrido en peleas de gallos y peleas de perros.
Un hombre de California murió en un desacuerdo sobre una apuesta de pelea de gallos de $ 10 .
El equipo de investigación de la HSUS combate a funcionarios públicos complacientes y ha trabajado con el FBI en casos de corrupción pública en Tennessee y Virginia. En ambos casos, los oficiales de la ley fueron acusados y condenados.
@ranald93, es triste esta realidad acerca de los animales. El humano, como muy racional que pueda ser, aveces supera los límites de la crueldad creyéndose con potestad para maltratar a seres con menos capacidad de defensa, claramente son casos particulares, pero los que hay deben ser punidos, a mi consideración, de la misma forma que una agresión a otra persona. Los animales también sienten dolor, esto es más que suficiente para perseguir a esos seres que hacen semejantes actos.
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